Este arte va más allá de lo estético y se arraiga en la espiritualidad china. La caligrafía es considerada una forma de meditación en acción, donde el calígrafo busca armonizar mente, cuerpo y pincel. Cada trazo es una expresión única del estado de ánimo del escritor, permitiendo una conexión íntima entre el creador y la obra. Así, a través de la caligrafía, se trascienden las barreras temporales, transportando al practicante a épocas pasadas mientras se desarrolla en el presente.

La caligrafía china no tiene límites de edad y puede ser apreciada por jóvenes y adultos. Más allá de ser un arte visualmente impresionante, la práctica de la caligrafía mejora la concentración, la paciencia y la disciplina. Al ofrecer este curso, te embarcarás en un viaje donde cada trazo se convierte en una oportunidad para explorar la riqueza de la cultura china y, al mismo tiempo, nutrir la creatividad y el bienestar personal de los participantes.

Contrariamente a lo que se piensa, el Chino es fácil gramaticalmente. No hay plurales, tiempo, ni género, ni conjugaciones verbales. Hablar y entender requiere un poco de atención por las tonalidades, y los caracteres Chino si que necesitan más trabajo. Pero es eso, dedicarle un poco de atención y esfuerzo, y verás los resultados.

No sólo porque se hable en China, la fábrica del mundo. Ni porque cad país, cada ciudad, cada barrio, tiene ciudadanos chinos o de procedencia china, con lazos culturales muy fuertes, y muchos de ellos con una gran capacidad de emprendimiento en los negocios. Además, las empresas chinas se están expandiendo a mercados como el nuestro.